LA MINGA: CASA GESTANTE
Por: Margarita Salcedo
Por: Margarita Salcedo
A una hora de Bogotá en Choachi,
un municipio de Cundinamarca, se esconde en las montañas una belleza única, una Colombia
inspiradora, purificadora…el día 27 de Octubre fui con un grupo de estudiantes
de gastronomía a un lugar llamado la
Minga lo que realmente quisiera es compartir mi experiencia e invitar a
aquellos que no la han tenido a participar de ella.
Lo que sabía de esta es que era
una finca auto sostenible, con una infraestructura muy original, al bajarnos de
los buses nos encontramos con el personaje que inicio todo este proyecto, Pedro
Medina, nos recibió con una gran sonrisa y una larga subida para llegar hasta
este lugar mágico… a pesar de las picadas de mosquitos y del ejercicio inusual
en mi, valió la pena el esfuerzo. La Minga significa “construcción colectiva
con fines de utilidad social.”
La Minga cuenta con varias
habitaciones, temáticas en las que podemos encontrar por ejemplo, la casa en el
aire cuenta con una capacidad de hospedaje para 22 personas. Este lugar tiene
mil cualidades de las cuales uno puede llegarse a enamorar, pero a mí lo que
realmente me gusto y me impacto es la visión que tiene su fundador, de entender
que no es solo explotar la tierra sino ser parte de ella, así como nosotros
recibimos tantos recursos de ella, que ella reciba nuestro agradecimiento y
amor, finalmente es ella la que nos provee el alimento y todos los sustentos
que necesitamos día a día. En esa tierra, las paredes son construidas con la
misma tierra en la que fue edificada
“Contamos con 3 bio-construcciones en barro y madera elaboradas
totalmente a mano, aprovechando los materiales que nos brinda la naturaleza,
mitigando así el daño que pudiésemos causar al medio ambiente.”
Además de toda la experiencia
visual, la cocina es espectacular, allí cocinan lo que cuidan en la finca, todo
lo que se sirve es cultivado en sus huertas orgánicas, cuenta con horno de
leña, fogones, cultivo de flores comestibles, además de la nevera eléctrica
cuenta con un refrigerador natural, pues dentro de esta cocina se puede
apreciar una gran parte de la montaña que proporciona frescura y allí
construyeron un mueble para mantener algunos alimentos frescos. El aroma a leña
en sus preparaciones es impresionante, se nota el amor y el empeño que sus
trabajadores le proporcionan a sus platos. Incluso el agua es más fresca y fría
que en cualquier otro lugar.
Me parece muy importante el
trabajo del fundador que se unió con sus vecinos y amigos, codo a codo y logro
su sueño aunque él dice que no ha terminado su trabajo con la Minga, es un
aporte increíble al planeta, a la humanidad y a la gastronomía a mi parecer,
pues es una invitación a volver a nuestras raíces, valorar lo que tenemos a
nuestro alrededor y aprovecharlo de manera sostenible en lo personal me sentí
muy identificada con este gran proyecto y os invito a que participen de esta
experiencia. Acá comparto el enlace de la pagina para los que estén interesados.
Bibliografía
Minga.yocreoencolombia.com. (s.f.). Recuperado el 30 de octubre de 2013, de
Minga.yocreoencolombia.com:
http://minga.yocreoencolombia.com/index.php?option=com_content&view=category&layout=blog&id=3&Itemid=5
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